El primer método consiste en poner unos hielos encima de la plancha caliente, ya que así con el contraste de temperatura podrás eliminar aquellos restos que permanecen adheridos en la plancha. Después, pasa un papel por la plancha y ¡listo!
Otro truco para limpiar la plancha de cocinar es usando zumo de limón, ya que además de ser una bebida muy rica, tiene un poder desengrasante muy alto, por lo que tu plancha de asar quedará en perfecto estado si le echas unas gotitas de este jugo en tu limpieza.
También puedes realizar la limpieza de tu plancha de asar usando una mezcla compuesta por agua y un puñado de sal gorda. Después, echa la mezcla en la plancha unos segundos para que ablande los restos de suciedad. Para terminar, pasa una bayeta o esponja para retirar la suciedad.
En nuestra web todos nuestros modelos de planchas de cocinar son de fácil limpieza
¿Quieres saber cómo limpiar una plancha de asar de gas? Puedes utilizar cualquiera de los métodos anteriores o utilizar la limpieza tradicional, con detergente y estropajo, que también es apta para la plancha de asar eléctrica.
Esperamos que estos trucos para limpiar la plancha de asar te hayan servido de ayuda y disfrutes cocinando tus recetas sacándole el máximo partido.
Pasos para limpiar adecuadamente la superficie de trabajo de las planchas industriales:
Para evitar el envejecimiento de la plancha industrial y conseguir un aspecto completamente limpio, los cocineros limpian sus planchas de cocina diariamente después de cada servicio.
1. Opción más ecológica y natural: Con la plancha caliente, se vierte una cantidad generosa de hielo y mediante una rasqueta especial para cocinas industriales (de teflón en el caso de planchas de cromoduro) se eliminan los restos de suciedad acumulándolos en el cajón recogegrasas, el cual tendremos que vigilar para evitar que se desborde.
Una vez limpia la plancha, se seca correctamente toda la superficie empleando para ello papel de cocina. Para asegurarse un correcto secado, se puede encender la plancha durante unos pocos minutos.
Después de secarla, opcionalmente y sólo en los casos de planchas de hierro fundido, se puede repasar y frotar toda la superficie con vinagre o limón (desengrasantes naturales). En las planchas con recubrimiento de cromo, se debe evitar verter cualquier ácido sobre su superficie (vinagre, limón, etc) para su limpieza.
Por último, con una servilleta mojada con aceite de oliva se vuelve a limpiar la plancha industrial. Esto evitará su oxidación. Este último paso es especialmente importante para las planchas de hierro fundido, mientras que para las de cromo, no es realmente necesario pero sí recomendable.
Siguiendo estos pasos todos los días, te asegurarás que tu plancha industrial se conserve en perfectas condiciones para acompañarte en tu trayectoria hostelera!
Para evitar el deterioro y un posible envejecimiento de la plancha de cocina y conseguir un aspecto limpio y libre de gérmenes, se debe limpiar a fondo la planchas industrial todos los días.
Para la limpieza de su plancha existen dos opciones:
- Mediante compuestos químicos indistriales.
Una vez enfriada la plancha, se eliminan los residuos de cocción utilizando una rasqueta especial para cocinas industriales, que debe ser de teflón para planchas de cromoduro. Luego, sobre la plancha se aplica una pequeña cantidad de algún producto químico desengrasante y se deja actuar unos minutos. Se tapa el orificio de salida al cajón recogegrasas con un tapón y se vierte agua a 55-60ºC y se espera unos minutos más. Posteriormente se retira el tapón y se elimina el agua. Finalmente con una esponja o balleta se limpia la plancha, se enjuaga abundantemente con agua.
- Utilizando una opción más natural y ecológica.
Con la plancha aún caliente, se vierte una cantidad generosa de hielo y con una rasqueta especial para cocinas industriales, que debe ser de teflón para planchas de cromoduro, se eliminan los restos de suciedad, enviándolos al el cajón recogegrasas, teniendo cuidado de evitar que se desborde. Así, con el hielo, se genera un choque térmico sobre la plancha que hace que se despeguen la mayor parte de los residuos. Para evitar grieta en la plancha, ésta debe tener un espesor suficiente como para aguantar dicho choque térmico. En algunos casos se pueden eliminar los restos utilizando piedra pómez, aunque así se puede arañar la superficie de la plancha.
En todo caso, una vez limpia la plancha, se debe secar toda su superficie, empleando papel de cocina. Para asegurar un secado completo, puede encendese la plancha durante un poco tiempo.
En el caso de las planchas de acero rectificado, opcionalmente, se puede frotar toda la superficie con vinagre o limón, desengrasantes naturales.
En las planchas con recubrimiento de cromo, debe evitarse este método y cualquier otro contacto con ácidos sobre su superficie.
Conviene también, para finalizar, especialmente para las planchas de acero rectificado, frotar la superficie de la plancha industrial con una servilleta mojada con aceite de oliva, para evitar su oxidación. En el caso de las planchas de cromo no es necesario pero sí recomendable.
Las planchas de asar eléctricas son muy útiles para cocinar diferentes alimentos de forma más saludable y, en ocasiones, incluso más sabrosa. Su principal ventaja es que cuentan con una gran superficie, que permite cocinar diferentes tipos de alimentos a la vez, y además son portátiles, lo que permite utilizarlas tanto en exterior como en interior.
Para eliminar los restos desincrustados de la plancha de asar, puedes emplear la propia esponja o un poco de papel de cocina. Lo ideal es que con el papel retires los restos sólidos para después limpiar la superficie con una bayeta multiusos y aclarar sucesivas veces.
Otro truco para desincrustar los restos de comida de la plancha de asar es usar una mezcla de agua con sal gorda. Basta con echar un puñado en un vaso y mezclarlo bien, para después verterlo sobre la plancha y dejarlo unos segundo a remojo. Después, se frota suavemente la superficie con una bayeta o esponja y se va retirando la suciedad con varios aclarados.
También puedes meter la plancha bajo el grifo, eso sí, una vez se haya enfriado y siempre después de retirar el cable de la corriente. Procura usar siempre agua fría y que esta penetre lo menos posible en las conexiones eléctricas del aparato.
No es aconsejable emplear productos desengrasantes sobre la plancha de asar, ya que podrían dejar residuos nada deseables si vamos a volver a cocinar en esta superficie. Emplea en su lugar productos inocuos como el vinagre o el bicarbonato de sodio, que además de limpiar eliminarán los olores fuertes que dejan algunas comidas.
Toma nota de estos 5 trucos básicos:
Limpia la plancha de cocina cuando aún esté caliente, de esta forma podrás despegar más fácilmente los restos de pan, carne, pescado…
Si añades cubitos de hielo a la plancha cuando aún esté caliente, adelantarás muchísmo el proceso de limpieza.
Las rasquetas son muy útiles para eliminar restos persistentes o limpiar la plancha en frío, pero asegúrate de que sean de un material que no dañe la superficie del electrodoméstico. Las mejores rasquetas son de teflón o de
Justo cuando acabes de utilizar la plancha, añade un buen chorro de agua bien caliente mezclada con zumo de limón o con vinagre. Deja actuar la mezcla durante unos minutos, retira el agua, repasa la plancha con un buen trapo húmedo y seca bien toda la superficie con bastante papel de cocina.
Si no utilizas la plancha o la parrilla a diario o vas a cerrar el bar o restaurante por vacaciones, asegúrate de proteger la superficie con una fina capa de aceite, de esta forma evitarás que se oxide.
¿Qué te han parecido nuestros trucos para limpiar la cocina industrial? ¿Quieres que te contemos más? ¡Deja un comentario!
Un gran cocinero, además de elaborar suculentos platos, también tiene que mantener su cocina limpia.
Nuestras planchas jinama son increíblemente fáciles de limpiar. Tardarás unos minutos en dejar tu plancha perfecta para su próximo uso.
El mantenimiento de las planchas jinama varía según el material de la placa de cocción, así que, antes de nada, asegúrate de qué tipo de placa posee tu plancha, acero rectificado al carbono o cromo duro.
Si tu placa de cocción es de acero laminado o acero rectificado al carbono, vierte agua muy fría (o incluso cubitos de hielo) sobre ella cuando aún esté caliente. Con la ayuda de una espátula elimina los restos adheridos y, seguidamente, seca con papel absorbente. Una vez perfectamente seca, rocíala con aceite y distribúyelo con más de papel absorbente.
Para mantener tu placa de cromo duro como el primer día, basta con echar unos cubitos de hielo sobre la plancha aún caliente y eliminar los restos de comida con la ayuda de una espátula y listo Ya tienes tu plancha de cromo duro a punto para volver a usarla.
En cualquiera de los casos, deberás retirar el recolector de grasas después de cada uso para vaciar los restos de comida que se encuentren en él.
Truco: para evitar que se te caigan los restos del recogegrasas, coloca papel absorbente en el fondo del cajón.
Para que tu plancha de cocina, ya sea a gas o eléctrica, se conserve en perfecto estado por más tiempo, es importante limpiarla después de cada uso o en profundidad una vez en semana. Cuando no estés utilizando tu plancha de acero laminado o acero rectificado al carbono pasado cierto tiempo, es recomendable limpiarla para evitar que se oxide. Protege tu plancha con una cubierta y una funda para que se conserve en perfectas condiciones.